It ain’t over til it’s over

La mañana era fría, como son las mañanas de invierno en Las Vegas. La noche había sido larga, como suelen ser las noches de reencuentros.
La canción en las bocinas del hotel confirmaba lo que ambos sabían, mientras ella caminaba por la avenida vacía y él recordaba cómo se sentía abrazarla de nuevo al dormir.